¿QUÉ CLASE DE PERSONA ERES?
«14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente. 15 En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie.»
1 Corintios 2:14-15
Dios por medio de Pablo nos hace saber que solo hay dos tipos de personas en este mundo: el hombre natural y el hombre espiritual.
Hoy meditaremos sobre las características del hombre natural:
- En primer lugar, NO PERCIBE las cosas espirituales, quiere decir que se trata de una persona que no acepta, no puede recibir las enseñanzas de la Palabra de Dios, la mayoría de nosotros sabemos que dentro de los síntomas del COVID es la pérdida de los sentidos del olfato y del sentido del gusto; por ejemplo, mi esposa cuando tuvo COVID presentó este síntoma, ella era incapaz de percibir los olores y sabores, ella misma me decía: «no puedo distinguir el sabor de los alimentos», por más que intentara era incapaz de diferenciar y reconocer esos sabores, esa es la condición del hombre natural.
- En segundo lugar, esto tiene que ver algo con esto último, la razón de su rechazo es que a ellos les parece “locura”, en otras versiones de la biblia lo traducen como que para ellos es absurdo o ridículo lo que dice la Palabra de Dios, les parece tonto seguir y obedecer las enseñanzas, principios, mandamientos y guías que Dios da en Su Palabra al hombre.
Pero, ¿sabes que es lo raro? Y lo digo con mucho cuidado, parece que hay personas dentro de la iglesia que son así, ellos no aceptan (rechazan) las cosas espirituales, rechazan la Palabra de Dios, aun profesando ellos ser creyentes, personas que les parece ridículo seguir el consejo de la Palabra de Dios, pues esta no se ajusta a su manera de vivir o pensar, o en todo caso, en su forma de percibir el cristianismo, lo que se les enseña de la Palabra de Dios, les parece algo exagerado o muy legalista y que, por consiguiente, se puede hacer unos “ajustes” para que la Palabra de Dios calce con su manera de pensar y de llevar la vida cristiana.
Como hemos visto hace un momento mi querido lector, estas son características del hombre natural, y si decimos ser hijos de Dios, como diría Pablo en Romanos 12:2:
2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Si decimos ser hijos de Dios, no amoldemos nuestra manera de pensar, actuar, razonar a como lo hace el hombre natural, comportémonos como hijos de Dios, dejándonos transformar por Dios a través de Su Palabra.
Alex Plasencia
Pastor Asistente