EL TEMOR DE JEHOVÁ
“El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza”
Proverbios 1:7
En la actualidad, hay conocimiento en abundancia, pero poca sabiduría. La sabiduría implica más que simplemente saber mucho; es una actitud fundamental que afecta cada aspecto de la vida.
Existen personas quienes aparentemente lo saben todo. Estas personas tienen una opinión dogmática acerca de todo, se muestran cerradas a lo nuevo, no aceptan la disciplina y se niegan a aprender, a estas personas Las Escrituras les llaman “necias” porque no son receptivas al consejo de otros, especialmente de quienes conocen bien y les pueden dar perspectivas inteligentes.
Hay que aprender de los demás y recordar que solamente Dios lo sabe todo.
Reconocemos que el ser humano es un ser ético, porque requiere de normas para evaluar su conducta, y estas se encuentran en las Sagradas Escrituras, o sea en Dios.
- EL PRINCIPIO DE UNA VIDA SABIA
Todos hemos oído decir que “temer a Dios” se trata más de “reverencia” que de “estremecerse y temblar” ante Dios. Es mejor decir que el “temor a Jehová” es un “temor real”, pero se trata de un “temor que combina el amor y la obediencia”. La sabiduría comienza allí.
El temor de Jehová es la virtud principal que te mantiene en el camino de la sabiduría, una vez que has iniciado a transitarlo. No se trata de lo que puedes hacer, sino de “cómo vas a vivir tu vida delante de Jehová”, ¿es con sabiduría, asombro y adoración?
El que teme la “Santidad de Dios”, temerá pecar, para honrar Su Carácter.
La Palabra de Dios nos anima a llevar una vida sabia, y nos dice que:
“El temor de Jehová es enseñanza de sabiduría”
(Proverbios 15:33)
“El temor de Jehová es manantial de vida”
(Proverbios 14:27)
Concluimos que:
“El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre”
(Eclesiastés 12:13)
2. EL PRINCIPIO DE UNA VIDA NECIA.
El necio es aquel que desprecia la sabiduría y la instrucción. Es una persona irreflexiva, descuidada, terca, cerrada de mente, que no discierne las cosas. Son aquellos que «no conocen a Jehová».
Los necios desprecian al Señor y a su Palabra pensando que no tienen ningún valor. Son sabios para hacer el mal, pero para hacer el bien, no tienen conocimiento.
Estas personas por su necedad rechazan la instrucción y la humildad. En esencia, por no dejarse enseñar o no quieren aprender, nunca alcanzarán la sabiduría.
3. CONCLUIMOS.
Que el “temor del Señor” es el principio de una vida sabia,
Que “la deshonra de Jehová y el desprecio de su Palabra” es el principio de una vida necia.
Que Dios, en Su gracia general, “permite a los incrédulos” saber mucho sobre el mundo; solo el temor del Señor le “permite al creyente” saber el significado verdadero de cualquier cosa.
¡Hermano!
¿Cómo vas a vivir?, ¿cómo un creyente sabio, temiendo a Dios, obedeciéndole y viviendo según Sus normas? O ¿Cómo un creyente necio despreciando la sabiduría y enseñanza de Dios para vivir a tu manera?
Destruyendo barreras
José Cabanillas
Pastor Asistente