Sentido de ubicación
“…Entonces los discípulos de Juan fueron a decirle: Rabí, el hombre que estaba contigo al otro lado del río Jordán, a quien identificaste como el Mesías, también está bautizando a la gente. Y todos van a él en lugar de venir a nosotros. Juan respondió: Nadie puede recibir nada a menos que Dios se lo conceda desde el cielo. Ustedes saben que les dije claramente: “Yo no soy el Mesías; estoy aquí solamente para prepararle el camino a él”.”
(Juan 3: 26 – 28)
La semana pasada vimos la nefasta actitud del líder de una nación al sentir celos de su súbdito, quien había sido el instrumento del Señor para traer una victoria nacional frente a los enemigos. Hoy veremos una situación similar, aunque con una actitud y respuesta totalmente diferente, diríamos “espiritual”.
Después de 400 años de silencio, Dios irrumpe nuevamente en la dimensión terrenal y envía al profeta Juan el Bautista. El profeta gozaba de gran fama y popularidad, gran multitud venían a él para bautizarse, (Lc.3:7). Podríamos decir en términos contemporáneos que se encontraba en la cúspide de su ministerio, un éxito rotundo.
Sin embargo, acontece lo relatado por el texto de hoy; los discípulos de Juan estaba muy preocupados y celosos porque la gente ya no iba con ellos sino con Jesús, ellos lo expresan así: “Y todos van a él en lugar de venir a nosotros”; a lo que Juan otro líder, pero espiritual, con sentido de ubicación, respondió de manera magistral:
- “Nadie puede recibir nada a menos que Dios se lo conceda desde el cielo”
La labor, el cargo, o el trabajo que realizamos lo hemos recibido de parte de Dios, indudablemente el instrumento fue una recomendación, Recursos Humanos, tu jefe, el pastor, la asamblea, etc. Pero recuerda, estamos donde estamos porque Dios así lo quiso.
- “Yo no soy el Mesías; estoy aquí solamente para prepararle el camino a él”
Lo que veníamos diciendo, desarrollar una clara identidad de quienes somos y a qué hemos venido a este mundo, saber exactamente quién es y a que ha sido llamado. Juan reconoce que solo es un profeta, y que tiene el propósito de prepararle el camino. Un ministerio que solo duró 6 meses, pero que sin duda fue uno de los más exitosos en la tierra, así lo registra el evangelio de Lucas 7: 26,28 “… ¿Buscaban a un profeta? Así es, y él es más que un profeta. Les digo que de todos los hombres que han vivido, nadie es superior a Juan”.
Qué tremendo testimonio. ¿Notas la diferencia entre ambos líderes?
Para Meditar
¿Sabes cuál es el propósito de Dios para tu vida? ¿Tienes sentido de ubicación? ¿te identificas con Saúl o Juan?
¡Firmes y adelante!
Néstor Méndez
Pastor Asistente