JESÚS HACE LA NAVIDAD
“Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces.” (Isaías 11:1)
No cabe la menor duda que la navidad, es fiesta más grande que la cristiandad puede celebrar. Lamentablemente cada vez más se aprecia un mayor despliegue comercial que espiritual. Y eso se debe al materialismo imperante en el corazón de los seres humanos; aunque muchos sean creyentes, la gran mayoría no ha podido liberarse de este nocivo lastre, que aún detiene el corazón de los seres humanos apegados a esta tierra.
Y esto, en parte se debe a que los pastores no hemos enseñado acerca de las cientos de profecías que hay en el Antiguo Testamento, y que tratan sobre el nacimiento, vida, pasión, muerte y resurrección de Jesús. Tan solo nos limitamos al día del nacimiento de Jesús y olvidamos que Jesús se anunció con cientos de años en todo el Antiguo Testamento. Por eso, ahora tomaré la profecía que viene del libro del profeta Isaías, uno de los más ricos en anuncios acerca del nacimiento de Jesús.
JESÚS SERÍA UN DESCENDIENTE DE DAVID Y REINARÁ CON SABIDURÍA. Dice el profeta Isaías unos 700 años antes del nacimiento de nuestro Salvador: “Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces. Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.” (Isaías 11:1-2)
- JESÚS SERÍA UN DESCENDIENTE DE DAVID. Por eso dice la Escritura: “Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces.” (Isaías 11:1) La imagen de un tronco es esa parte seca y añeja del árbol que permanece sin fruto, pero que a veces sorprende brotando de la noche a la mañana, un renuevo, un vástago, un “hijito”. La casa de Isaí, el padre del Rey David, había permanecido inactiva por unos 600 años cuando Jesús vino como el Mesías anunciado y el Rey de los judíos. Sin embargo, al decir del tronco de Isaí y no de David, evidencia la naturaleza humilde del Señor; ya que Isaí fue menos famoso que Su hijo David.
- JESÚS SERÍA EMPODERADO CON SABIDURÍA. De allí que Isaías predijo: “Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.” (Isaías 11:2). El Mesías estaría empoderado con siete porciones del Espíritu del Padre:
- El Espíritu de Jehová. El Mesías estaba dotado del Espíritu del Padre, el cual reposaba sobre él. Y lo mostró varias veces durante Su ministerio en esta tierra.
- El Espíritu de sabiduría. Tuvo la oportunidad de mostrarlo reiteradamente durante Su ministerio terrenal. Pablo lo afirmó cuando dice: “Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, …” (1Co.1:30)
- El Espíritu de inteligencia. Lo que significa que entiende todas las cosas y nos entiende perfectamente a nosotros, por eso es nuestro Sumo Sacerdote.
- El Espíritu de Consejo. Jesús era el Consejero por excelencia. Nadie de los que pidieron consejo, se quejaron por la respuesta recibida a las necesidades consultadas, sin importar la edad que tuvieran las personas.
- El Espíritu de Poder. Evidenciado tantas veces, como aquella oportunidad frente a la tumba de Lázaro: ¡Lázaro, ven fuera! (Juan 11:43)
- El Espíritu de Conocimiento. Jesús mostró que conocía todo lo que estaba en el hombre: “Porque Jesús sabía desde el principio quienes eran los que no creían, y quien le iba a entregar.” (Jn. 6:64b)
- El Espíritu de temor de Jehová. Aunque tanto el Padre, como el Hijo y el Espíritu Santo, mantienen el mismo honor en Su esencia; sin embargo, Jesús, al venir al mundo para salvarnos, adoptó una actitud de sumisión, respeto y honor a Su Padre Dios. Es allí precisamente nos muestra Su actitud de temor, como en la cruz.
No permitamos que sectas que aprovechan este tiempo, para perturbar la fe de los débiles, les digan que Jesús no nació en navidad. Nosotros no celebramos el día. Celebramos Su advenimiento, Su amor por nosotros y Su salvación preciosa. Es la presencia de Jesús entre nosotros la Navidad, sin él no hay Navidad.
¡Con la expectativa de verte!
Vicente Alcántara Ulloa
Pastor Supervisor
De gran bendición.