EL GRAN AMOR DE DIOS
“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.”
Romanos 8:38-39
En el mundo, las relaciones humanas suelen ser condicionales. Muchas amistades y relaciones se basan en lo que podemos ofrecer o en cómo nos comportamos. ¿Qué pasa cuando fallamos? Hay decepción, rechazo y en algunos casos la amistad se pierde, ¿Sabes que cuando se trata de Dios, no ocurre así? Permíteme mencionarte esta verdad asombrosa que nos revela la Palabra de Dios: Dios nos ama con un amor que nunca cambia y que no depende de lo que hagamos. Su amor es incondicional y eterno.
Lo primero que nos muestra este versículo es que el amor de Dios es inquebrantable, nada en toda la creación puede separarnos del amor de Dios. Esto significa que:
- No importa lo que enfrentemos, Dios sigue amándonos.
- Nuestro pecado y errores no pueden borrar su amor. (¡Esto no nos da licencia para pecar!)
- Las circunstancias difíciles no cambian su fidelidad.
Recuerda esta verdad: el amor humano puede fallar, pero el amor de Dios nunca falla, nunca cambia.
Lo segundo que debemos considerar a la luz de este pasaje es que Dios nos ama a pesar de nuestras fallas, Dios nos conoce mejor que nadie. Él sabe nuestras debilidades, nuestros errores y aun así nos sigue amando, el amor de Dios no depende de nuestro desempeño, tristemente en el mundo, el “amor” que ellos practican es condicional, es un falso amor en el que muchas personas dicen “amar” solo cuando somos «buenos» o «exitosos»; Dios nos ama tal como somos.
En tercer lugar, al mostrarnos este único e inigualable amor, este versículo nos recuerda que Dios es el amigo perfecto, será por eso que en Juan 15:15 dice: “Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre os las he dado a conocer”. Jesús nos llama amigos. No somos simples seguidores o siervos, sino que tenemos una relación de amistad íntima con Él.
Permíteme mencionarte algunas características de Dios como el amigo perfecto:
- Siempre está presente – Nunca nos abandona (Mateo 28:20).
- Nos entiende – Él conoce nuestras luchas y sentimientos (Hebreos 4:15).
- Nos corrige con amor – Su disciplina nos transforma (Proverbios 3:12).
- Es fiel – Aunque nosotros seamos infieles, Él sigue siendo fiel (2 Timoteo 2:13).
Muchas personas pueden fallarnos, pero Jesús jamás nos dejará.
Y por último, y es una verdad que llena mi ser, es que nada puede separarnos de su amor, Pablo menciona diferentes cosas que podrían amenazar nuestra relación con Dios, pero concluye con firmeza que nada nos puede separar de su amor.
- Ni la muerte ni la vida – La eternidad no cambia su amor hacia ti.
- Ni ángeles ni potestades – Ningún poder espiritual puede alejarte de Él.
- Ni lo presente ni lo por venir – Nada de lo que ocurra hoy o en el futuro podrá romper su amor hacia ti.
- Ni lo alto ni lo profundo – No hay distancia que limite el amor de Dios para contigo
Esto significa que su amor es más fuerte que cualquier barrera. No importa qué tan bajo hayamos caído o qué tan lejos nos sintamos, Dios sigue amándonos con intensidad y nos busca para restaurarnos.
¿Estoy confiando en el amor incondicional de Dios o dudo de Él cuando fallo? ¿Dependo del amor de las personas para sentirme valioso, o mi identidad está en el amor de Dios? ¿Cómo puedo responder al amor inquebrantable de Dios en mi vida?
«Señor, gracias por amarme con un amor perfecto y eterno. Ayúdame a recordar que tu amor no depende de mis méritos, sino de tu gracia. Cuando me sienta lejos de Ti, recuérdame que nada puede separarme de tu amor, y si caigo, siempre volver a ti en arrepentimiento y fe. Enséñame a amar a los demás con ese mismo amor incondicional. En el nombre de Jesús, amén.»
Te comparto el siguiente link de una canción que nos recuerda y habla de este gran amor para con nosotros: https://www.youtube.com/watch?v=geV8H5XFMd4

Alex Plasencia
Pastor Asistente