NO TE DETENGAS

NO TE DETENGAS

Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. Josué 1:9

Después de la muerte de Moisés, Josué fue designado como líder para guiar al pueblo de Israel a la tierra prometida. En medio de esta transición y responsabilidad, Dios le aseguró a Josué que no estaría solo en esta tarea, sino que Él estaría con él en todo momento, fortaleciéndolo y guiándolo. Este mensaje fue crucial para que Josué pudiera liderar al pueblo de Israel con determinación y confianza, sabiendo que Dios estaba con él.

Al cierre del año 2024, es una buena oportunidad para reflexionar. Si no lo has hecho, te animo a tomar un momento para considerar las innumerables batallas que has enfrentado contra la adversidad. La adversidad es un conjunto de circunstancias difíciles, desafiantes o desfavorables que ponen a prueba la fortaleza espiritual, emocional o física de una persona. Sin embargo, como buenos soldados de Cristo, si seguimos en pie es porque somos fortalecidos en el Señor. Nada de lo que ha sucedido nos ha llevado a renunciar o abandonar. Cada victoria sobre la adversidad es un recordatorio: “No importa cuán adverso sea el momento, Dios nunca olvidará su palabra para contigo, Él es fiel a sus promesas.”

El pueblo de Israel experimentó el poder de Dios cuando fueron liberados de la esclavitud en Egipto. Era esencial que Josué, como líder, se fortaleciera y continuara confiando en el Señor para guiar al pueblo hacia la tierra prometida. Dios tenía un plan para Su pueblo, y su consejo sigue vigente para nosotros hoy. Ante la incertidumbre y adversidades que puedan surgir en este año 2025, consideremos estas palabras:

1. Esfuérzate: Este consejo nos anima a ser diligentes, valientes y persistentes en nuestras acciones y decisiones.
2. No temas: La exhortación a no temer nos recuerda que Dios está con nosotros en todo momento. Al confiar en Su promesa de cuidarnos, podemos superar el miedo y la ansiedad.
3. No desmayes: Este consejo nos insta a mantenernos firmes y perseverantes en nuestra fe, incluso cuando las circunstancias sean difíciles. Saber que Dios está con nosotros y que Su fortaleza es nuestra fortaleza nos da el ánimo para seguir adelante sin desanimarnos ni rendirnos.

En medio de las batallas y desafíos que nos esperan en este nuevo año, es reconfortante recordar la hermosa promesa de Dios: «Estaré contigo dondequiera que vayas«. Independientemente de las circunstancias que enfrentemos, podemos fortalecernos en Su palabra y confiar en Su presencia constante a nuestro lado. No permitamos que la maldad nos venza, sino que tomemos valor y nos mantengamos firmes, sabiendo que Dios está con nosotros en cada paso del camino. Sigamos adelante con valentía y determinación, sabiendo que Él nos sostendrá en medio de las adversidades. ¡Que esta promesa nos inspire a afrontar el año 2025 con fe y confianza en el poder y el amor de Dios!

Avancemos con fe