EL JUSTO JUICIO DE DIOS
8 en llama de fuego, para dar retribución a los que no conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo; 9 los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder,”
2 Tesalonicenses 1:8-9
Pablo escribe para aclarar un poco más cómo vivir la vida cristiana a la luz de la próxima venida de Cristo. De hablar de la persecución de los creyentes pasa a hablar del juicio de los incrédulos en el futuro. Sin duda habrá un juicio donde se verá quienes heredarán el reino de los cielos y quienes serán enviados a la condenación eterna. Dios no es injusto para dar la retribución debida a cada persona.
- ¿QUIÉN SUFRIRÁ EL JUICIO DE DIOS?: v.8
- “los que no conocieron a Dios” (v.8a)
- Gr. ‘eidosin’: el verbo “conocer” está en sentido afectivo, de relación como en 1 Corintios 8:3: “Pero si alguno ama a Dios, es conocido por él.”
- La frase “los que no conocieron a Dios” alude a los gentiles incrédulos descritos en 1 Ts. 4:5. Aquellos que deliberadamente han rechazado conocer al Señor. En cambio, el cristiano no será afligido por la ira de Dios, porque en Jesús halló la salvación; sino lo sufrirá todo aquel que rechaza Su Palabra. Ya la primera carta Pablo lo había anunciado: 1 Ts. 1:10; 5:9.
- En aquel día, cuando venga el juicio ante el Gran Trono Blanco, aunque cada incrédulo presente su caso, ninguno podrá ser salvo debido a su rechazo al Señor. Jesús murió por cada uno de ellos, y su rechazo a conocerle es condenación al infierno. Su único camino de salvación fue rechazado. Lamentablemente, hoy no pocos siguen rechazando el mensaje de salvación a través de la persona de Jesucristo. Amados, las decisiones en la tierra tienen trascendencia en el cielo. Reconocer a Jesús como Señor y Salvador es una decisión personal.
- “ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo” (v.8b)
- Esto indica a un grupo más endurecido, porque la desobediencia al Evangelio implica conocerla y resistir a vivir el mensaje, lo cual es mucho peor. Es probable que Pablo se refiera a muchos judíos que tuvieron la oportunidad de escuchar a Jesús o el evangelio por medio de los apóstoles y lo rechazaron. Rechazar el evangelio es rechazar a Dios.
- Muchos de los que asisten a la iglesia hoy en día pueden estar condenados desde este punto. Podemos estar en una iglesia, y no estar en Cristo. Podemos cantar el domingo, y no adorar a Jesús. Podemos leer la Biblia y no vivirla. Podemos amar a las personas (altruista) y no amar a Dios. Que pena que algunos crean hoy que se puede ser “cristiano” sin la sumisión y entrega a Cristo. Amados, asistir a la iglesia, escuchar música cristiana, tener amigos cristianos, incluso servir el algún ministerio no es suficiente. La única suficiencia es Cristo en mí. Mateo7:21-23, dice: “21 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. 22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.”
- En la vía dolorosa, Jesús camino a la cruz, había muchos espectadores y muy poco seguidores. Quizás es lo mismo que está sucediendo hoy en las iglesias. Sin duda, hay muchos caminos que conducen al infierno, pero sólo un camino que conduce al cielo: Jesucristo.
- “los que no conocieron a Dios” (v.8a)
- ¿CÓMO SERÁ EL JUICIO DE DIOS?: v.9
- “los cuales sufrirán pena de eterna perdición” (v.9a)
- La expresión “los cuales”, se refiere a los descritos en el v.8: los que rechazan a Dios y los que rechazan obedecer Su evangelio.
- La frase “eterna perdición” muestra que no será una crisis temporal; sino, una condición eterna. No significa dejar de existir o ser aniquilado; sino estar separado de Dios, en un estado miserable por la eternidad. Sin duda con referencia al infierno: “Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.” (Ap. 20:15).
- “excluidos de la presencia del Señor” (v.9b)
- Lo más doloroso de esta condición no es arder en el lago de fuego; sino, que la presencia del Señor no estará jamás con ellos. ¡Es terrible vivir fuera de la gracia de Dios y recibir Su justo juicio! Aquellos que serán separados de Dios por la eternidad ya no tendrán ninguna esperanza de salvación.
- Quien no conoce a Jesús nace una vez y muere dos veces; pero, quien ha depositado su confianza en Jesús como Señor y Salvador, nace dos veces y muere sólo un vez.
- “los cuales sufrirán pena de eterna perdición” (v.9a)
Amados, sí hay un infierno y Jesús volverá, para quienes lo rechazaron, ese día será de lloro y crujir de dientes frente al juicio del Gran Trono Blanco; en cambio, para nosotros, quienes tenemos nuestra fe cimentada en Cristo Jesús, estaremos frente al tribunal de Cristo, donde Jesús será nuestro abogado: “Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.” (2 Corintios 5:10). Aquel día será de gozo de ver cara a cara a nuestro Salvador. Sin duda, correré a besar sus manos y pies, y a acariciar sus mejillas. ¡Anhelo que llegue ese día!
Mientras tanto, esperando su venida, les animo en el Señor: ¡Estudiemos la Palabra! ¡Vivamos la Palabra! ¡Enseñemos la Palabra!
Daniel Alcántara
Pastor Titular