¿Probado por Dios?

¿Probado por Dios?

¹ Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham, y le dijo: Abraham. Y él respondió: Heme aquí. ² Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré.

Génesis 22:1-2

Ésta es una de las escenas más conocidas por nosotros los cristianos donde la fe de Abraham es probada y aprobada por Dios,  Dios sin titubeos, pues Él siempre actúa así,  le pide a Abraham algo que en su humanidad suena descabellado,  pero en cuando a Dios y su relación con Él,  no. 

Abraham no duda en obedecer a Dios.  Abraham no le pone peros a Dios,  Abraham no duda de la promesa de Dios,  de que iba a llegar a ser padre de multitudes,  Abraham demuestra que su fe le lleva a amar a Dios más que a cualquier cosa o persona en el mundo.

Pero me temo que este relato ha quedado en nuestra memoria más como una historia digna de admirar, que ser una historia digna de imitar por nosotros.

Hoy en día existen cristianos que no están dispuestos a ceder ni un milímetro de su amor al dinero, tiempo, o deseos, dejando a Dios relegado y muy atrás en cuanto  a sus prioridades,  amor y fe. 

Algo que podemos ver en este texto bíblico es que Dios prueba a los que verdaderamente son suyos,  Dios prueba a aquellos,  como Abraham,  con quienes Él desea hacer grandes cosas,  ¿Te está probando Dios?  O ya dejó de hacerlo hace tiempo, si te percatas que hace tiempo no has sido probado por Él,  es muy posible que en algún momento en el pasado dejaste no sólo de escuchar claramente su voz,  sino que dejaste de obedecerle dándote ciertas licencias que como hijo de Dios nunca debiste hacer. 

Dios nos invita a que reflexionemos y meditemos en este día, cómo está nuestra relación con Él y que tan aprobados estamos delante de Él.