BÚSQUEDA GENUINA
«y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón«
Jeremías 29:13
Este versículo es parte de una carta que el profeta Jeremías envió a los cautivos de Israel en Babilonia. En el contexto más amplio, Dios está hablando a través de Jeremías a su pueblo, que ha sido llevado cautivo. En este pasaje en particular, Dios está instando a su pueblo a buscarlo con todo su corazón.
La idea central es que la búsqueda de Dios debe ser sincera y completa. No es simplemente una búsqueda superficial o ritualista, sino una búsqueda que involucre todo el corazón. Dios promete que aquellos que lo busquen de esta manera lo encontrarán. Este versículo destaca la importancia de la sinceridad, la devoción y la entrega total en la relación con Dios.
La frase «me buscaréis y me hallaréis» del verso leído enseña la disposición de Dios a ser encontrado por aquellos que sinceramente lo buscan. Aquí hay algunas enseñanzas clave que se pueden extraer de esta frase:
- Disponibilidad de Dios: La frase implica que Dios no está oculto ni inaccesible. Más bien, está dispuesto a ser encontrado por aquellos que lo buscan.
- Iniciativa humana: La búsqueda de Dios es una iniciativa que parte del ser humano. La responsabilidad recae en las personas de buscar a Dios activamente.
- Relación personal: La búsqueda de Dios implica una relación personal. No se trata solo de cumplir rituales o formalidades, sino de buscar a Dios con el corazón, lo cual implica una conexión profunda y personal.
- Sinceridad y compromiso: La frase sugiere que la búsqueda de Dios debe ser genuina y sincera. No se trata de una búsqueda superficial, sino de un compromiso total y sincero.
- Recompensa de la búsqueda: La promesa implícita en la frase es que aquellos que buscan a Dios con todo su corazón lo encontrarán. La relación con Dios no es unilateral; es una búsqueda recíproca.
Muchos decimos que queremos tener una relación especial, cercana y transformadora con Dios. Sin embargo, para llegar a tener esa clase de vínculo con Cristo hay que estar comprometidos a regirnos por un estilo de vida que nos lleve en esa dirección.
La búsqueda de Dios debe ser una expresión de amor y devoción sincera. La pregunta que nos confronta es ¿Qué nivel de intimidad deseo tener con Dios? ¿Tengo un horario semanal que expresa mi decisión de priorizar mi relación con Cristo?
Avancemos con fe
Juan Carlos Chirinos
Juan Carlos Chirinos
Pastor Asistente